martes, 19 de junio de 2007

Rome Total War Alexander. Sarissa

Filipo II

Es raro encontrar a alguien que no sepa de las proezas de Alejandro Magno. En su conquista hacia Persia e India llevó a cabo batallas épicas, como la de Gaugamela, que ganadas en clara desventaja numérica hicieron mitificar a este rey.

También en el Continente Americano y no hace de ello tantos siglos, los Conquistadores Españoles se enfrentaron a ejércitos superiores en efectivos, como en la batalla de Otumba, pero claro, cuando pensamos en ellos, los vemos acorazados y disparando sus trabucos y cañones a mansalva.

¿Contaba Alejandro con alguna arma que aventajase a su ejército? Pues sí. Se llamaba Sarissa. Su historia, si se mira desde un punto sencillo puede ser incluso cómica.

Conquistas de Alejandro


Filipo II de Macedonia, padre de Alejandro, a su paso por Tebas como rehén, aprendió muchos de los conceptos y estrategias militares del ejército griego, en especial la táctica de los Hoplitas, imitada por muchas civilizaciones mediterráneas, que en formación de Falanges eran durísimos de pelar. Se suele llamar falanges a todo ejército cuyos soldados combaten en una línea y muy cerca entre ellos. Los clásicos Hoplitas iban protegidos con yelmo, escudo y placas de bronce para cubrir las zonas más débiles de sus piernas. Armados con espada, y con una lanza de dos metros de largo asemejaban un erizo impenetrable.

Cuando Filipo volvió a Macedonia perfeccionó esta formación en diferentes aspectos, uno de ellos fue armarlos con una lanza denominada Sarissa. Y aquí el elemento que puede ser cómico, por lo menos a mi me lo parece, porque la Sarissa medía alrededor de los 6 m de largo, incluso 7 m. Cuando nos iniciamos en las batallas del juego es lo que más sorprende, las dimensiones de este arma.

Y digo gracioso, porque claro, va un tío, se hace de información militar del enemigo, ve que tienen unas lanzas de dos metros, y concluye que para ganarlos se tiene que hacer con unas lanzas de mayor longitud, lo malo es que si el enemigo se entera de sus planes concluya que también deben hacerlas más largas, y así indefinidamente hasta luchar espalda con espalda, y dándose bocados en las orejas.

Sarissa

Por supuesto que esto es mirándolo desde un punto de vista simpático, porque hay que saber que la estructura y organización militar que Filipo II de Macedonia legó a Alejandro Magno fue fabulosa. La maquinaria de guerra, como catapultas y torres móviles para sitiar las ciudades, incluso eran las mejores que se habían diseñado hasta entonces.

Con sus cerca de 5 Kg la Sarissa se convirtió en la lanza más pesada diseñada en la antigüedad, por lo que se confeccionó de tal forma que pudiese dividirse en dos ó más partes para desmontarla cuando el ejército marchaba. En definitiva, la mejor arma para luchar contra los Hoplitas Griegos, la mejor para extender los dominios de Macedonia, pero fue Alejandro el que dirigió con sabiduría sus afiladas puntas hacia tierras Persas.


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